Durante la Edad Media nace la falsa creencia de considerar al gato negro como de mal agüero, por pensar que cumplían mandatos de las brujas y esto dio lugar a que los fanáticos sacrificaran a miles de estas bellas e inocentes criaturas.
El gato aparecía ligado al paganismo de la Edad Media a través del culto de la diosa Greya, diosa del amor y de la curación según la mitología nórdica. Esta diosa guardaba en su jardín las manzanas con las que se alimentaban los dioses del walhalla y en su iconografía aparecen dos gatos tirando del carro de la diosa.
En el año 1400, la especie estuvo a punto de extinguirse en Europa.
El aniquilamiento de los gatos fue de tal magnitud que cuando la peste negra azotó Europa en el siglo XIV, causando más de veinticinco millones de muertos, apenas sí quedaban ejemplares para luchar contra las ratas, principales propagadores de la enfermedad. Y sin ninguna duda, la plaga fue tan devastadora debido al desenfrenado exterminio de los gatos. La Iglesia alentó de tal forma la persecución de los gatos que llegó a convertirse en espectáculo la quema de estos pobres animalitos en las hogueras de la noche de San Juan.
Pero el papel de los gatos en la Edad Media no solo se reducía a la de accesorio en aquelarres y autos de fé, hay muchos testimonios de que los gatos eran considerados como un animal útil e incluso agradable de tener alrededor.
Como se demuestra en esta cita De
"Perceval o El Cuento del Grial" Chretien de Troyes (Cap. Las Gotas de Sangre en la Nieve)
"vos lo amansareis como se amansa a un gato acariciándolo".
O este del
El Bestiario de Aberdeen,un manuscrito de la alta edad media. Trata de diversos animales y otros temas naturales. Del gato dice:
El gato es llamado musio, cazador de ratones(mur en latín)
porque es el enemigo de éstos.
Comúnmente se le llama catus, gato,
por captura, el acto de cogerlos.
Otros dicen que el nombre viene de capto,
porque atrapa a los ratones con sus agudos ojos.
Pues tiene una vista tan penetrante
que vence a la oscuridad de la noche
con el brillo de la luz en sus ojos.
Así catus significa en griego agudo,
o ingenioso.
Traducción basada en la del
En Los "Evangelios de las Ruecas" o Évangiles des quenouilles que fueron publicados en Brujas hacia 1480. Con la excusa de unas reuniones en las que las mujeres hilaban e intercambian consejos, dichos, remedios, etc. Entre ellos abundan las supersticiones, y se cita unas cuanta veces a los gatos, con naturalidad como si fuese corriente tener uno en la casa:
"Si veis un gato sentado en una ventana al sol,
lamiéndose el trasero y levantando
la pata para pasarla por encima de la oreja,
no dudéis que ese dia no lloverá.
GLOSA. Entonces Dama Mehault de Caillotte
se levantó y dijo que esto es cierto
y que ella no hacía nunca la colada cuando
veía a su gato lamerse el trasero."
Segundo Día, Capítulo XXII, Evangelio de las Ruecas
"Si se quiere mantener al gato
o la gallina en casa para que no se pierdan,
hay que coger el gato o la gallina,
darles tres veces la vuelta alrededor de las llares,
y después restregarles las patas contra
la pared de la chimenea; así ya no podrán salir de la casa."
Segundo Día, Capítulo XXIIII, Evangelio de las Rueca
Nota: los llares son las cadenas que se cuelgan en el hogar (chimenea) para colgar de ellas los calderos al cocinar
"Si una mujer pone en la oreja de su marido
plumas de un capón que hubiera estado
con jóvenes polluelos,
pelo de la pata derecha de su perro
y pelo del extremo de la cola del gato,
permanecerá siempre enamorado de ella".
Belotte Court-Talon,
Quinto Día, Capítulo I, Evangelio de las Ruecas
También existe el "Libro de los Gatos"
que pertenece a Pascual de Gayangos y aparece en el volumen 51 de la Biblioteca de Autores Españoles bajo el título Escritores en prosa anteriores al sigloXV, es un compendio de ejemplos y fabulas morales, de antes del siglo XV , no se sabe bien porque se le dió este titulo pero si que hay referencia a estos animales, dos ejemplo:
IX. Enxemplo del gato con el mur (ratón). El gato de un monasterio se viste de monje para atrapar a un ratón.
XI. Enxemplo de los mures. Sobre como un ratón prefiere comer mal pero tranquilo y otro bien con la amenaza de un gato.
Aparte de proporcionar compañia o cazar ratones se sabe que también los gatos eran utilizado para otros menesteres como los culinarios o para la utilización de su piel.
Documentación:
Historia Viva, Vida en la Edad Media.
gatos en la edad media)
Miscelánea Medieval, selección y edición de Judith Herrin, ed. Grijalbo
Evangelios de las Ruecas, presentados por Jacques Lacarrière, ed. José J. de Olañeta, Medievalia