Una Sevillana en Holanda

Os preguntareis como una sevillana puede sobrevivir en un pais como Holanda, ni yo misma lo sé, pero el amor tiene mucho que ver !!!

lunes, 23 de febrero de 2009

La Cocina Encuentada - 100 Gatos


"100 Gatos"


Pablo Lores Kanto.

1
Iba por la calle recogiendo gatos. Los recién nacidos y los sarnosos. En fin, todo lo que maullara. Por eso le decían la Loca de los Gatos. Es de suponer que la vivienda de alguien así reciba el apodo de su propietaria, una anciana anoréxica con un par de charcos de tristeza en la mirada.
Me dijeron que doblando la esquina estaba la casa de la Loca de los Gatos. Sabiendo de su piedad, le llevaba un gato callejero que había rescatado de las manitas de unos niños incapaces aún de distinguir una travesura de una maldad.
Toqué con insistencia el portón. Era una finca inglesa levantada en Magdalena Vieja allá por los años Veinte. Estaba al borde del acantilado, desamparada, derruida por ochenta años de brisa marina, neblinas y garúas.
-¿Qué quiere? -se oyó una voz hosca al otro lado del portón. El maullido del gato la persuadió. Corrió los pestillos y por un resquicio pude ver sus ojos desconfiados.
-Este gato necesita de usted -le dije.
-Apesta a kerosén-dijo la vieja.
-Unos chicos le querían prender fuego- le expliqué.
Me hizo pasar y el jardín que circundaba la casa estaba poblado de gatos y en la sala, donde luego me sirvió una infusión de te, canela y anís, los gatos retozaban a sus anchas en sofás, sillas, alfombras y ventanas.
-¿Cuántos gatos tiene?
-No sé, quizá cien o más. Ya no los cuento- dijo en tanto curaba las heridas del gato recién llegado- Se pondrá bien. Con un baño le quitaremos el kerosén. Fue y al rato volvió de la cocina con una batea con agua tibia y una pastilla de jabón.
2
Una mañana se oyó un disparo. Incapaz de enfrentar un desfalco y restituir su buen nombre, honor y reputación, su padre se había suicidado. Sólo entonces se enteraron de que estaban en bancarrota. Las tierras en provincias y las propiedades urbanas les fueron embargadas y apenas lograron retener la finca inglesa, en donde, a los pocos años, su madre moriría de pena.
Germán, su hermano mayor, estudiaba en Europa y se quedó varado con la quiebra del negocio familiar. Luego, Alemania invadió Polonia y nunca más se supo de él. Ella, en cambio, se había casado con el hijo zángano de un acaudalado que esperaba sumar a sus arcas la fortuna de su nuera. Viendo que había sido un mal negocio, el acaudalado logró que su hijo se divorciara para volverlo a casar con una mujer de su clase, círculo y fortuna. En esa época Lima se movilizaba en tranvías.
3
Encontró en las copas el bálsamo a su soledad. El alcohol le hizo remontar las calles, los bares y las cantinas; le encantaba el aturdimiento que provoca la embriaguez, la llana algarabía que produce la batahola del brindis, y así fue disipando el esplendor de su belleza, consumiendo en juergas sus encantos, rifando su cuerpo por una migaja de cariño y de besos. Sí, juntas andaban ella y su tristeza.
Una madrugada de vómitos se miró en un espejo. El espejo le devolvió la piltrafa de una mujer incapaz de fijar la atención ni mantener el pulso firme que requiere un colorete al deslizarse por los labios. Caminó sin rumbo pero el rumbo tenía como destino los acantilados. Desde las agudas rocas de la orilla del mar donde las olas se despedazan, se vio a una mujer en el filo del precipicio. Demasiado al borde para que se tratara de alguien ensimismado en la visión que produce el horizonte al alba.
-Fue entonces que sentí un movimiento tibio rozando mis tobillos, y lo que se movía y daba vuelta alrededor de mis pies desnudos, tenía cola, ojitos y bigotes. Me estremecí. ¿Un poco más de té? -interrumpió su relato.
-No, gracias- le respondí. Tenía a la anciana al frente, sentada con un angora color caramelo sobre el regazo. Le acariciaba el elástico lomo.
-Lo aparté de una patada -continuó la vieja- pero el gato insistió. Buscaba el calor de mis pantorrillas, la caricia de mis manos. Era muy pequeño, de color pardo, quizá tenía seis o de repente ocho semanas de nacido. Me enojé. Estaba aún ebria. Le aparté de un puntapié y el gato fue a caer al precipicio. Sólo entonces recapacité en lo que había hecho. Pasmada no me atreví a mirar hacia el abismo. De pronto, unos maullidos desesperados treparon por la pendiente. El gatito estaba vivo en una leve saliente. Me arrodillé y estiré el brazo lo más que pude y lo rescaté. Sólo entonces me di cuenta de que yo no le había rescatado, sino que él me había salvado la vida.
4
-¿Si encuentro otro gato lo recibirá?
-¡Por supuesto! Esta es la casa de los gatos.
Oscurecía y para la anciana ningún gato era pardo en la noche. Al menos, los suyos. Caminando por el jardín iba nombrando a cada uno de sus felinos: esa es Rascuacha. Aquél, Encuentro. El otro, Armando. El de allá, Keke. González es el que allí salta; y ese otro, chusquito, se llama Kirin. El gordito que viene, Rodolfo... Y así, juntos llegamos al portón de la calle. Le agradecí el té.
-Por favor, visíteme -rogó la viejita.
-Claro que lo haré- le prometí.
-Como verá -dijo echando otro vistazo a su jardín- tengo aquí más de cien razones para seguir viviendo.


*Este hermoso cuento fue tomado del sitio: http://www.ficticia.com/

sábado, 14 de febrero de 2009

Feliz Día de San Valentin




Hoy no se cocina !!!


viernes, 13 de febrero de 2009

Mini Tartitas de Frutas

Para 10 minitartitas de Peras y 10 de Piña se necesita:

Masa de hojaldre ( puede ser congelada)
1/4 litro de crema pastelera al chocolate
1 bote de 850 gr de peras en almíbar
1 bote de 450 gr de piña en almíbar
avellanas
guindas confitadas.


Para la crema pastelera al chocolate:
25 gr de mantequilla
1/4 litro de leche
un poco de corteza de limón
un palito de canela
2 yemas
60 gr de azucar
25 gr de maizena
200 gr de chocolate sin leche

En un cazo se pone la mantequilla al fuego, cuando se derrita incorporamos la leche, la corteza de limón y el palito de canela, dejamos que hierva.
Se baten las yemas junto con el azucar y la maizena en un cuenco y cuando la leche comience a hervir se va agregándo poco a poco a la mezcla de huevos removiendo cuidadosamente.
Se vuelve a poner en el cazo y se cocina a fuego muy bajo o al baño maría, removiendo hasta que espese.
El chocolate se derrite al baño maría y se le incorpora a la crema pastelera, se mezcla muy bien batiendo, se deja enfriar y ya esta lista para utilizarla.

De la masa de hojaldre cortamos 20 rectangulitos o cuadraditos, los pinchamos en la parte central para que no suba.
En la parte central le ponemos 2 cucharaditas de crema pastelera al chocolate.
Cortamos las peras en laminas y las rodajas de piñas en dos.
las colocamos sobre el chocolate así.





A las tartitas de peras le pondremos avellanas picaditas y a las de piñas guindas confitadas.
La metemos en el horno, previamente caliente a 200ºC, unos 20 minutos.
Se pueden servir, caliente, tibias o frías y espolvoreadas con azucar glas










Sugerencia :
Se pueden hacer antes y calentar en el momento de servir a 210ºC solo 5 minutos.
También se puede hacer con la crema pastelera sin chocolate

Carne de Membrillo


Carmen trajo esta exquisita carne de membrillo que tomamos con queso.
La receta es de su padre, Salvador.
Ingredientes:
Membrillo
Azucar
Agua
Los membrillos se ponen a cocer en una olla cubiertos de agua durante una media hora. Cuando se han enfriado un poco, se pelan y se les quita el corazón, se va sacando la carne del membrillo.
Se pesa la carne del mebrillo cocido y se añade la misma cantidad de azúcar.
Se tritura todo según el gusto de cada uno (más fino o más grueso) y se pone en una olla a fuego medio durante una media hora o hasta que tenga la consistencia deseada, sin dejar de remover con una cuchara de palo.
Se vierte en un molde y se deja enfriar.
Ya lo tenemos listo para tomar solo o con queso, leche frita, membrillo con nata, en empanadillas o incluso en ensaladas como la ensalada de espinacas con membrillo, etc.

Paella Valenciana (Pollo y Conejo)

Ayer tuvimos en casa una de nuestras reuniones gastronómicas.
Y es que nuestras reuniones por suerte o por desgracia, sobre todo mía, son siempre con comidas de por medio y eso luego se nota en la figura.

Pues como digo ayer nos reunimos Las Carmenes : Carmen, de Valencia, Carmen, la Andaluza, como dice la otra Carmen, mi madre y yo con nuestros respectivos.

Carmen, de Valencia, venía dispuesta a enseñarnos lo que es una autentica Paella Valenciana, la de toda la vida, la que se ha hecho en su casa de siempre, la de sus abuelos y padres, y la que ella hace siempre a sus hijos y nietos que ya son holandesés, para no perder sus raices y eso que lleva 40 años o casi los 40 por aquí.

Como digo venía provista con todos los ingredientes que con algún esfuerzo le costó conseguir, hasta trajo Arroz SOS, marca muy conocida en España entera y una lata de verduras tipicas para la paella valenciana que Rosario le trajo.




Carmen, la andaluza, trajo para el postre una rica Carne de Membrillo, que ella misma hizo con la receta de su padre, la que combinamos con queso y nos quedó deliciosa y yo hice unas Mini Tartitas de Frutas.

Aquí van la receta y las fotos.
Para 8 personas:
Arroz 800 gr
Pollo ( 1kg)
Conejo (1kg)
Ferraura(judias verdes anchas 300 gr)
Tabella (judias blancas 300 gr)
Garrafó 300gr ( se puede usar judiones)
1Cuharada de Pimentón rojo dulce molido
0,2 gr Azafrán en rama o molido
2 Tomates naturales picaditos sin piel
2 ajos picaditos
Aceite de Oliva Virgen ( un buen chorro)
Sal.
Unas ramitas de Romero.
2 vasos de Agua por cada uno de Arroz.

Imprescindible 2 o más Botellas de Vino tinto de Valencia ( esto para ir tomando mientras vamos haciendo la Paella)

1 Se coloca la Paella en el fuego con la sal y el aceite y se mezcla moviendolo.

2 Se sofrie el pollo y el conejo repartido por toda la paella para que cojan la sal y hasta que esten bien doraditos los trozos.

Carmen de Valencia preparando la Paella Valenciana de Pollo y Conejo


3 Cuando está bien sofrita la carne se le añade el tomate y el ajito picado. Se rehoga unos minutos y ahora le ponemos las judías verdes, el garrafón y el pimentón, se remueve bien todo con la carne.
Con el tomate picadito y las judias verdes


Con el pimentón


Removiendo el pimentón


4 Se le añade agua (mejor caliente) casi cubriendo los clavos de las asas antes de que se queme el pimentón y se agarre a la paella. Acto seguido se le pone el Azafrán (en rama o molido)


5 Se deja hervir hasta que todo este tierno, haya tomado bien el gustito y quede sabroso.

6 Ahora se le pone el Arroz formando una cruz en el centro de la paella.

Carmen poniendo el Arroz SOS


El arroz en forma de cruz

Y se reparte con la paleta.


7 Se deja cocer de 18 a 20 minutos.
Se le pone unas ramitas de romero fresco.


8 Retirar y dejar reposar. Se puede aumentar el nivel del fuego justo al final para que el arroz del fondo se pegue, produciendo el socarrat característico( lo que más me gusta !!!). Tapar con un paño húmedo y dejar tapado 5 minutos.



Ya esta lista nuestra Paella Valenciana Autentica !!!

Y Riquisimaaaaaaa con ensalada y vino Tinto !!!

domingo, 8 de febrero de 2009

Paquetitos de Salmón y queso a las finas hierbas



Para 4 personas:

1 paquete de pasta filo
4 lomos de salmón
4 cucharadas de queso a las finas hierbas (tipo Philadelphia con finas hierbas)
Una cucharada de mantequilla derretida.

Precalentar el horno a 200ºC.
Cortar 16 cuadrados de pasta filo, de la medida que quepa el lomito de salmón, superponerlos unos encima de otros pintandolos con mantequilla derretida.
Poner el lomo de salmón encima de la pasta filo y sobre este una cucharada de queso a las finas hierbas, cerrar bien el paquetito arriba.
Colocar los paquetitos en una bandeja del horno forrada con papel sulfurizado.
Se hornean a 200ºC durante 20 minutos.

Servir caliente con pure de patatas, guisantes y zanahorias salteados en mantequilla y con una pizca de nuez moscada molida.
Muy rico con una copa de vino Sauvignon blanc

martes, 3 de febrero de 2009

Paella de Mariscos

Eber aquí esta la receta que te prometí de la Paella, esta es la que yo hago, mi amiga Carmen, de Valencia, dice que le pongo muchas cosas, pero no deja de reconocer que está riquisimaaaaa, jeje !!!

Jimena ha estado aquí el fín de semana y como le prometí la hicimos, ella ya ha tomado nota y le ha gustado muchísimo.





La receta para 4 personas:

400 g de arroz
500 g de almeja y o mejillones
250 g de calamares
300 g de gamba
1 cebolla pequeña
1 zanahoria
2 tomates
150 g de guisantes (congelados sirven)
1 pimiento verde
2 pimientos morrones (para adornar)
2 dientes de ajo
10 hebras de azafrán
Colorante alimenticio amarillo
Sal
Perejil
1/2 taza de aceite de oliva

Lavar las almejas en agua fría con sal; abrirlas en un cazo con 1/2 taza de agua, y reservar las almejas y el caldo por separado, colar por si tiene arena, en caso de no tener almejas las puedes sustituir por mejillones, también se pueden poner los dos, mejillones y almejas. Para los mejillones haríamos lo mismo para abrir y reservamos también el caldito.
Pelar las gambas y cocer las cáscaras y las cabezas durante 10 minutos; colar y reservar el caldo.
Lavar los pimientos verdes, quitarles las semillas y trocearlos.
La zanahoria se raspa y se corta a cuadritos o a rodajitas.
Lavar los calamares y cortarlos en tiritas.
Calentar el aceite en una paella o en una cazuela no muy alta, agregar los calamares, saltear un par de minutos y añadir la cebolla muy picada, los pimientos, y la zanahoria cuando este pochadito se incorporan los tomates pelados.
Rehogar todo durante 15 minutos.
Incorporar el arroz, y las ebras de azafrán y el colorante amarillo, revolver y regar con el caldo caliente de las gambas y almejas (si hace falta más liquido se le puede poner caldo de pescado), calculando el doble volumen que el del arroz. Hacer un majado con los ajos pelados y perejil y añadirlo a la paella, sazonar, cocer 10 minutos a fuego vivo. Bajar el fuego y cocer unos 8 ó 9 minutos a fuego suave. Al final de la cocción, agregar las gambas, los mejillones, las almejas y los guisantes. Dejar reposar unos 3-4 minutos y servir enseguida para que no se pase.
Adornar con pimientos morrones cortados en tiritas y limón.



Los mariscos se pueden sustituir por carne (pollo, costillitas de cerdo, carne magra de cerdo) entonces sería una Paella de Carne, pero se puede mezclar mariscos con carne, entonces será una Paella Mixta.

Más adelante escribiré otras recetas de Arroces.

Espero que la hagas y que os guste.

Besitos

lunes, 2 de febrero de 2009

Uno más en la Familia

Y no, no es un gato, esta vez es una perrita, es de raza Yorkshire Terrier.
Es todo un peluchito !!!
Se llama Tosca y nos tiene a todos locos de contentos !!!
Isis y Nelson la han acogido muy bien, aunque Nelson la mira algo asombrado al ver esa bola de pelo con rabo moviendose por todo el salón, jeje !!!










Corona de Chocolate con Salsa de Naranja




Para la Corona de Chocolate:

250 g de Chocolate Fondant
1/2 bote pequeño de leche condensada
200 ml de Nata
1 vaso de agua
3 hojas de gelatina

Para la salsa de naranja:
3 naranjas
3 cucharadas de azucar
1 cucharadita de harina de maiz
1 copita de licor ( Cointreau )



Poner en un cazo la leche condensada, la nata, un vaso de agua y calentarlo.
Cuando empiece a hervir, retirarlo del fuego, añadir el chocolate troceado y removerlo hasta que esté fundido, también se puede derretir el chocolate en el microondas eso facilita mucho el trabajo.
Agregar las hojas de gelatina, previamente pasadas por agua fría, mezclarlo todo muy bien y pasarlo por un colador.
Verterlo en un molde de corona, ligeramente humedecido, dejarlo enfriar, una vez frío se pone en el frigorifico minimo 3 horas para que quede bien cuajado.


Ahora elaboraremos la salsa de Naranja.
Poner el azucar en cazo al fuego y dejarlo hasta que esté caramelizado, ojo que no se queme que si no esta muy amargo !!!
Añadir el zumo de las naranjas y cocerlo hasta que el caramelo se disuelva, sin dejar de remover.
Luego se añade el licor y la harina de maiz disuelta en un poco de agua fría y cocerlo unos minutos más para que la salsita espese.

Desmoldar la corona de chocolate y servirla decorada con naranja confitada y acompañada de la salsa de naranja.




Sugerencias:

Se puede preparar también en porciones individuales.
El Cointreau se puede cambiar por otro licor que sea de vuestra preferencia.


Para la Cascara de Naranja confitada:

Ingredientes:

cáscara de naranja
azúcar
sal

Preparacion:

Pelar las naranjas y quitarles algo de la parte blanca. Cortar las cáscaras en juliana y/o en cuadritos. Poner una cacerola con abundante agua con sal sobre el fuego. Taparla y dejar hasta que rompa el hervor.
Echar las cáscaras y dejarlas hasta que nuevamente rompa el hervor. Escurrirlas, y enjuagar con agua fría. Ahora la herviremos sin sal , repetimos el proceso dos veces más, es decir escurrimos, enjuagamos con agua fría, y hervimos de nuevo, esto es para quitar el amargor.
Ahora hacemos un almibar con agua y azúcar una vez que comience el hervor añadimos las tiritas de naranja blanqueadas, cocinar a fuego mínimo hasta que las cáscaras estén completamente transparentes.
Dejarlas enfriar, escurrirlas y pasar las cascaritas de naranja por azúcar granulada, dejar reposar y ya estan listas para utilizar.
Se le puede dar muchas utilidades para magdalenas, bizcochos, y bañadas en chocolate también estan riquisimaaaassss !!!
También se puede hacer la cáscara de limón o pomelo de esta misma manera.